5 remedios naturales que pueden calmar y aliviar la tos

La tos juega un papel fundamental en la eliminación de los elementos irritantes e infecciosos del cuerpo, pero puede resultar muy molesta. El mejor tratamiento para aliviar la tos dependerá de la causa subyacente. Existen muchas posibles causas, entre las que se incluyen las alergias, las infecciones y el reflujo ácido.

El cuerpo reacciona con la tos para intentar expulsar estas sustancias de dichas vías y así limpiarlas. En este artículo te damos algunos consejos para aliviar la tos de forma natural, sin medicamentos.

1. Té con miel

Según algunos estudios, la miel puede aliviar la tos. Para usar la miel como tratamiento de la tos, mezcle 2 cucharadas soperas con agua caliente y un té de hierbas. Beba esta mezcla una o dos veces al día. Por favor, evite que los niños menores de 1 año ingieran miel.

2. Jengibre

Un estudio sugiere que algunos componentes antiinflamatorios presentes en el jengibre pueden relajar las membranas de las vías respiratorias, lo que reduce la tos. Prepare un té de jengibre con 20-40 gramos de rebanadas de jengibre fresco a una taza de agua caliente. Deje que se enfríe durante unos minutos antes de beberlo. Añada miel o zumo de limón para mejorar el sabor y calmar aún más la tos. Tenga en cuenta que, en algunos casos, el té con jengibre puede causar malestar o acidez estomacal.

3. Consumir líquidos en abundancia

Lo más importante para la tos o un resfriado es mantenerse hidratado. Las investigaciones indican que ingerir líquidos a temperatura ambiente puede aliviar la tos, la secreción nasal y los estornudos.

El alivio de los síntomas es inmediato y continúan durante un tiempo después de terminar la bebida caliente.

Entre las bebidas calientes que pueden ser reconfortantes, encontramos:

  • Los caldos claros
  • El té de hierbas
  • El té negro descafeinado
  • El agua caliente
  • Los zumos de frutas calientes.

4. Vapor de agua

La tos húmeda, una de las que produce mucosa o flemas, podría mejorar con el vapor de agua. Tome una ducha o un baño de agua caliente y deje que el baño se llene de vapor. Quédese dentro durante unos minutos hasta que los síntomas mejoren. Beba un vaso de agua después para refrescarse y evitar la deshidratación.

De forma alternativa, prepare un bol de vapor de agua. Para hacerlo, rellene un bol grande con agua caliente. Añada hierbas o aceites esenciales, como el eucalipto o el romero, lo que le ayudará a mejorar la descongestión. Inclínese sobre el tazón y cubra la cabeza con una toalla. Así el vapor se quedará atrapado. Inhale los vapores durante 5 minutos. Si siente el calor del vapor en la piel, deténgase hasta que se enfríe.

5. Gárgaras de agua con sal

Este remedio es simple es uno de los más efectivos para tratar el dolor de garganta y la tos húmeda. El agua con sal reduce las flemas y la mucosa en la parte posterior de la garganta, lo que puede disminuir la necesidad de toser.

Revuelva media cucharadita de sal en una taza de agua caliente hasta que se disuelva. Deje que la solución se enfríe lentamente antes de usarlo para hacer gárgaras. Mantenga la mezcla en la parte final de la garganta durante unos momentos antes de escupir la mezcla. Haga gárgaras con el agua y sal durante varias veces cada día hasta que mejore la tos.

Evite darle agua con sal a los niños más pequeños, ya que no podrán hacer gárgaras correctamente y si tragan el agua con sal, puede ser peligroso.

Busque tratamiento médico de emergencia si su tos está afectando su capacidad para respirar o si está tosiendo con sangre. Las infecciones del tracto respiratorio involucran dolores en el cuerpo y fiebre, mientras que las alergias no lo hacen.

Consulte a su médico de atención primaria si experimenta los siguientes síntomas además de la tos:

  • Escalofríos
  • Deshidratación
  • Fiebre superior a 38˚C
  • Malestar, o una sensación general de malestar general
  • Tos productiva con flema de olor fétido, espesa, de color verde o amarillo.
  • Sensación de debilidad generalizada